jueves, 21 de marzo de 2013

Coca-Cola y su proyecto para acabar con "el conflicto de los mil años" entre India y Pakistán.

El llamado conflicto de los mil años es denominado así porque los países de Pakistán e India llevan en constante tensión y enemistad desde prácticamente el año 1000. Parece mentira que la independencia de estos dos actuales territorios no se produjera hasta el año 1947 .



Las disputas entre la actual Unión de la India y Dominio de Pakistán no han parado desde entonces generando situaciones de mucha gravedad. Es tan serio este conflicto que ha estado apunto de desatar ataques nucleares y es que a pesar de toda la historia, la cultura e incluso la geografía que estas naciones han compartido, la hostilidad continua siendo protagonista.

Son muchos los intentos que se han llevado a cabo con el fin de mejorar la relación entre estos países de distintas religiones, todos ellos fallidos, no obstante, la marca reina del capitalismo, Coca-Cola quiere intentar aportar su granito de arena y su mano pacificadora.

¿Cómo pretende la multinacional ayudar a dos países que no han sido capaces de reconciliarse ni en mil años? Pues bien, la marca ha creado unas máquinas expendedoras que pretende colocar en India y Pakistán, unidas entre si y que sean capaces de regalar latas por cada gesto de paz que se manden los unos a los otros. 


Un ambicioso proyecto con muy buenos fines al que han denominado "Small World Machines". Este proyecto esta preparado para entrar en acción, sin embargo, la multinacional espera el momento más adecuado para su instalación pues no es nada sencillo cambiar el mundo con unas máquinas de bebidas, de hecho lo más seguro es que las acabasen destruyendo o que se aprovechasen de la intención que tiene Coca-Cola.



Desde luego la idea es estupenda, pero hace falta algo más que dos máquinas de bebidas para cambiar esta situación. Es un buen paso y podría ser el comienzo pero sinceramente, hasta que los ciudadanos no cambien su mentalidad, hasta que no eduquen a las personas a respetar y a creer en las creencias y en las buenas intenciones de sus vecinos, hasta que no dejen de manipular la información en los medios y hasta que las personas con más poder e influencia no crean en la paz entre estos dos países... Nadie lo creerá y sus relaciones no mejorarán, pero como sigan así, culpándose y acusándose los unos a los otros de todos los problemas del mundo y de no haber llegado todavía a una solución aún, no habrá máquina que cambie esta terrible y real situación.

El proyecto aunque pueda parecer utópico merece la pena ser visto ;)




No hay comentarios:

Publicar un comentario