Aunque la Super Bowl ya ha terminado y con ella han quedado reflejados los millones de
dólares invertidos en anuncios. Unos anuncios que en su mayoría han destacado como habitualmente por el
humor, el absurdo y la utilización de personajes famosos.
No
obstante, en un intento por mejorar la percepción del evento y la imagen de
este deporte, dañada tras el incidente en que un jugador de fútbol americano
atacó a su mujer, se ha decidido lanzar un
anuncio alertando sobre la violencia de género.
El
anuncio se ha basado en hechos reales y está inspirado en un caso de verdad. Un
sencillo spot en el que se muestra a una mujer
llamando al 911 pero que en lugar de pedir ayuda, pide una pizza. Enseguida, su interlocutor al
teléfono se da cuenta de que la mujer está pidiendo la pizza porque no puede
hablar abiertamente.
Otras
imágenes muestran una casa destrozada, la foto de una pareja en el suelo, una
puerta abollada por un puñetazo o libros totalmente rotos obviando la situación
de maltrato. El lema es claro: “Cuando es difícil hablar, nos toca a nosotros escuchar”.
Debo
decir este spot me ha gustado mucho y que da la idea de una posible vía de
escape para mujeres que se encuentren atrapadas en la misma situación. Un gran
toque para que este evento sea más serio en cuestión de publicidad.
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