Es por ello que la popular marca ha decidido llevar a cabo una idea muy especial y es que como todo lo que hace Coca-Cola ha terminado siendo una sobresaliente acción de marketing que no ha gustado sino que ha encantado.
El objetivo de la compañía era sentar a los vecinos de Nápoles a la mesa para que cenasen acompañados de una forma improvisada, no importaba si estos se conocían o no.
'Let's eat together' (vamos a comer juntos) era el mensaje que acompañaba a esta acción.
Para lograr el propósito, se contrató al chef Simone Rugiati y se colocó una mesa con todos los cubiertos preparados en una plaza de Nápoles.
Cualquier persona que pasara en ese momento estaba invitada a sentarse para disfrutar de una Coca-Cola y de las delicias italianas que preparaba el mismo cocinero.
Creo que el vídeo, como siempre lo explica mejor. Yo no sé si a estas personas les alegró sentarse a comer con los demás pero a mí ver el vídeo me ha hecho sonreír y me ha parecido sin duda una gran iniciativa, aunque no esperaba menos de una multinacional que exige siempre lo mejor en sus campañas.
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