No todos los tropiezos son malos, el de Jennifer Lawrence ayudó a Dior a destacar.

Es cierto que la pesadilla de cualquier persona cuando va a recoger un premio en frente de una gran audiencia es la de tropezarse y caer, una situación que todos nos hemos imaginado alguna vez y que la semana pasada durante la entrega de los Oscars le ocurrió a Jennifer Lawrence cuando iba a recoger su estatuilla.

La actriz declaró que fue un momento muy embarazoso para ella aunque las fotos que captaron este traspié muestran una gran elegancia, en parte debido a la belleza de su vestido Dior. Obviamente, una situación como esta en un evento tan mediático no dejó indiferente a nadie.


Todas las miradas y todos los comentarios en Twitter se desviaron hacia este tema e incluso se tomó una foto del momento que circuló por todas los medios, una foto que ahora Dior ha transformado en su próxima campaña publicitaria.

Se trata de una elegante y oportunista acción de marketing de la cual la firma de moda se ha beneficiado enormemente logrando una gran atención por parte de su público objetivo. Es una forma de sacarle el lado positivo a las malas situaciones, de sacar lo mejor de cada momento y aprender a levantarse con cada tropiezo.

Sin duda la marca ha conseguido destacar y todo se lo debe al pequeño traspié de la artista, a la originalidad y a lo real de la situación porque se nota que no es algo planeado, que es algo espontaneo y por lo tanto es una visión realista de las cosas.