A falta de presupuesto buenas son botellas de Sprite.

Fue mi madre la que me hizo referencia a esta noticia al quedarse maravillada y sorprendida tras llegar a ver lo bonito que puede quedar un árbol navideño construido a base de botellas.

No se trata de una campaña de marketing ni de ninguna acción con fines publicitarios, sin embargo indirectamente va a salpicar a la marca Sprite con estos efectos, pues el verde de sus botellas ha conseguido un resultado óptimo para la creación de un árbol de Navidad.

La construcción o realización de este árbol se ha llevado a cabo en Kaunas, la segunda ciudad más grande de Lituania y es que debido a sus problemas económicos debían reducir costes pero eso sí, sin acabar con el espíritu navideño.

Jolanta Smidtien ha sido la artista que se ha encargado de diseñar y poner manos a la obra el levantamiento de este extraordinario árbol artificial con 32.000 botellas usadas de Sprite. 

Eso sí, esta idea es obra de admiración y para ser mostrada tiene en su interior miles de lucecitas que lo iluminan en la noche.

Está claro que cuando hay una falta de presupuesto o dinero, la imaginación y la creatividad son las mejores armas. 

Es en el momento en el que hay dificultades en el que hay que buscar una alternativa adecuada para nuestros bolsillos. 

Sin duda, una ventaja de los recortes en presupuestos es lo mucho que puede llegar a estimular nuestra imaginación porque casi siempre hay una forma más barata de realizar las cosas y no siempre tiene porque ser peor. Este es un caso perfecto de ello.