Black Friday. Cuando los grandes descuentos llevan al consumismo más caótico.

MEn Enero y en Julio/Agosto es cuando en España disfrutamos de las mejores rebajas y es que a todos nos gusta encontrar descuentos en nuestros establecimientos preferidos pero ¿alguna vez habéis llegado a pelearos como en las películas por la ropa u productos que queréis comprar? ¿Habéis llegado a situaciones límites y de tensión en períodos de rebajas?

El Black Friday o Viernes Negro se celebra en los Estados Unidos, el día después de Acción de Gracias o "thanksgiving", es decir, el último viernes de Noviembre y se considera el día que inaugura las compras navideñas en este país.


Pero lo que de verdad caracteriza a los Black Fridays son los descuentos que se ofrecen en los establecimientos, aunque hay algunos descuentos modestos, prevalecen las rebajas más bien exageradas. Algunos ejemplos que se han podido encontrar en el Viernes Negro de este año han sido:


- La consola Xbox 360 de 4Gb con el Kinect por hasta 105 Euros.
- Una cámara digital Nixon que valía con anterioridad unos 225 Euros por 75 Euros en este día.
- Portátiles Toshiba de 15,6 pulgadas por aproximadamente 225 Euros.


Y así muchas más ofertas, mejores y peores, ¿qué pasa cuándo los descuentos son tan atractivos? Pues pasa lo que ha ocurrido en Estados Unidos, que la gente acampa la noche anterior, se forman aglomeraciones, las personas se impacientan, se empujan, se pelean, se crea tensión y unos consiguen los que quieren y otros no.

Gente esperando frente a una tienda el black friday

Este año, el Black Friday ha sido de lo más caótico, la tensión se acrecentó de tal forma que llegó a enloquecer a personas y una señora roció con spray de pimienta a las personas de su alrededor (situación que recordó a la polémica de los policías rociando a estudiantes de California con el mismo arma)  para hacerse a la desesperada con los mayores descuentos, un hombre además, disparó a otro por una Xbox, se destrozaron pantallas, gente acabó herida...

Liketing Picture

Peor que una batalla ¿verdad? Pues es lo que ocurre en un país donde el consumismo es el pan de cada día y por tanto, unos descuentos como estos generan comportamientos y acciones desesperadas por adquirir las mejores gangas del mercado. 


¿Hasta que punto merece esto la pena? Los consumidores que quieran algo deben luchar y sufrir por ello, pasarlo mal...y ¿los vendedores? No me quiero ni imaginar el día que tienen que sufrir estos pobres trabajadores. Los productores si que podrán ampliar sus ventas y aunque debido a los ridículos precios el margen de beneficio por cada producto vendido sea menor, las cantidades vendidas son inmensas, pues bueno, siempre y cuando no acaben como ayer derribando los productos...


En mi opinión, la solución a este problema que se ha generado no sería eliminar los Viernes Negros puesto que ya forman parte de la cultura americana pero si aplicar unos descuentos más moderados para así, moderar también a las multitudes.


Para todos los que ven esto como una americanada, mirad como ya copiamos la forma de celebrar Halloween o Papá Noel... y no solo eso, en Logroño ayer se celebró este Black Friday y muchos establecimientos aplicaron descuentos del 20%, no son descuentos tan exagerados como en EEUU al igual que no lo fue la actividad comercial pero puede ser el comienzo de la importación de esta caótica celebración...¡Qué tiemblen los precios!

Black Friday en Logroño.