domingo, 15 de abril de 2012

Nueve años y 150.000 dólares en el bolsillo. No hay que ser mayor para ser un emprendedor de éxito.

Tener una buena idea o ser ingenioso...no siempre es lo más primordial para llegar al éxito; es un "plus" pero no asegura que todo saldrá bien, es cierto que es muy importante, pero sobre todo, se han de tener ganas y paciencia, si se quiere empezar un negocio con futuro.

Estos dos adjetivos son los que han llevado a Caine Monroy al éxito y bueno, muchos dirán "¡claro! Es fácil tener paciencia cuando solo se tienen 9 años" pero es este pequeño, no solo ha sacado el máximo provecho de su infantil imaginación sino que también ha sabido esperar sentado en una silla hasta que su primer cliente llegara.

Y es que mientras la mayoría de nosotros cuando teníamos su edad y llegaba el verano, solo pensábamos en pasarlo bien, salir con los amigos, bañarnos y veranear, él se propuso crear un salón de juegos recreativo con piezas de cartón, cinta adhesiva y todo los desechos de la tienda de repuestos para automóviles de su padre.



El chico lo cogió con ganas, creo su saloncito en el mismo local en el que su padre trabaja y todos los días se sentaba a esperar sin perder esa ilusión y esa mirada soñadora que caracteriza a los niños de su edad pero pronto se chocó con la realidad...nadie visitaba su "negocio".

Lo tenía todo, tickets de entrada al precio de 2 dólares, una caja registradora, piezas de cartón que imitaban distintos deportes y pasatiempos y un local en un humilde barrio en la ciudad de Los Ángeles, todo menos clientes. Hasta que un día, la cosa cambió.

Y ese momento fue el mismo día en que el primer cliente entró en su espacio de juegos, con la suerte de que no era una persona cualquiera, era el cineasta Nirvan Mullick, un joven que se entusiasmó con el trabajo y la perseverancia que desprendía el chiquillo.

Así pues, trató de ayudarle subiendo un cortometraje de 11 minutos, para dar a conocer al mundo lo que Caine había comenzado y además, después del éxito de esta producción que pronto consiguió más de 2 millones de visitas, habilitó una cuenta para que se hicieran donaciones destinadas a la educación de un niño, que muestra ya sus ganas de comerse el mundo; donaciones que a día de hoy superan los 150.000 dólares.

Con Nirvan Mullick
El niño sonríe feliz, no podía ser de otra forma, pues gracias a este vídeo su local se llenó, sin embargo, el padre sabe que esto es un boom y que pronto todo habrá pasado, eso sí, lo que nadie podrá quitarle a Caine es su momento de gloria y el reconocimiento de que este chico tiene madera.

La parte del dinero que no se dirija a los futuros estudios de Caine, será recaudada y destinada a la creación y financiación de la fundación: "Caine's Arcade", que tiene el objetivo de descubrir pequeños talentos como él, fomentar este tipo de actividades y ayudarles a emprender.

Está claro, que la actitud de Caine era necesaria para llegar a su punto de éxito pero también debemos darle la importancia que se merece al cineasta Mullick puesto que sin él no habría logrado ni esa afluencia, ni todas las donaciones



Esto nos enseña la lección de que además de virtudes y actitud, se necesita un medio para llegar a la fama o al menos para darse a conocer, en este caso una persona con influencias y presencia en las redes que le de un empujoncito a la creación en la que tú crees.

¿Queréis otro ejemplo? Pues yo me pregunto si la canción de Miguel Teló "Ai se eu te pego" hubiese llegado hasta donde ha llegado, especialmente en España, si no hubiese sido por Cristiano Ronaldo y sus bailes en el campo de juego. Un personaje de lo más influyente en la prensa española.



6 comentarios:

  1. Como suele decirse, estar en el lugar apropiado en el momento oportuno es lo más importante.

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    1. Tienes razón, a veces todo es cuestión de suerte pero digamos que si este chico no hubiese tenido paciencia y hubiese decidido abandonar en el momento en el que no veía a nadie entrar, nada de esto hubiese sucedido...Me leí una vez un cuento: "el libro de la buena suerte" que tenía como paradoja el mensaje de que la suerte se busca, que cada uno se crea su propia suerte...nadie puede quedarse sentado y esperar que le toque la lotería si no ha comprado un boleto, a este chico su espíritu, su esperanza y su ilusión le llevaron a encontrar esa suerte.

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    1. Jajajaj te digo lo mismo que a B218, una vez me leí un breve cuento que recomiendo a todo el mundo: "el libro de la buena suerte" y que manda un mensaje claro: la suerte nos la creamos nosotros mismos, esa suerte hay que buscarla porque nada llega por arte de magia y este niño supo esperar a pesar de que al principio nadie aparecía, nunca perdió ni la esperanza ni las ganas y es lo que le ha llevado al lugar donde está ahora.

      Aún así estoy totalmente de acuerdo, a mí también me trajo muchos recuerdos leer esto pues mi hermano y yo, cuando veraneábamos en el pueblo de mi madre creamos un mural de cartón con cromos de "Pokémon" que era lo que entonces estaba de moda y cobrábamos unas pesetas (la antigua moneda de España) para que los otros niños pudieran disparar con pistolas de bolas u otras herramientas a los cromos y si daban a alguno de ellos, se lo llevaban :) ¡qué pena que ningún cineasta pasara por ahí en ese momento!

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