En época de exámenes, Kit Kat ofrece a los estudiantes un cuaderno que funciona como almohada.

En mi caso los exámenes finales han terminado y esto le sucede también a muchos otros estudiantes, no obstante, hay quien todavía está en la época de finales o quien se encuentra en la convocatoria de recuperaciones, así como en el caso de Extremadura, cientos de alumnos que se preparan para las pruebas de acceso a la universidad.

Esto implica un no parar de estudiar, invertir horas y horas delante de libros y apuntes con el objetivo de conseguir aprobar todos los exámenes, sobre todo porque es la recta final, el momento en el que los alumnos nos ponemos a estudiar más intensamente.

Esto bien lo saben las compañías de bebidas energéticas que nos intentan vender más energía y más horas de aguante, esas horas que no hemos aprovechado para estudiar durante el curso, lo que no sabía yo es que Kit Kat también nos ofrecería una ayuda a los estudiantes.


Su ayuda viene de mano de un ingenioso artefacto al que han decidido llamar el "Pillow Book" (en español, algo así como libro almohada). Este producto parece un cuaderno pero la tapa tiene una peculiaridad: se pude inflar.

De esta forma, lo que parece un simple artículo de merchandising se convierte en un producto de gran utilidad para los jóvenes, ya que una cabezada entre estudio y estudio ayuda a sentirse con más energía y más si esa cabezadita se hace sobre una superficie cómoda.


La acción que la multinacional llevó a cabo en Brasil fue todo un éxito y recorrió las redes sociales como la pólvora por lo que la compañía no dudó en enviar este utensilio a varios usuarios que en seguida continuaron la comunicaron vía Internet. Una acción destinada al público ideal y que no podría ser más coherente con su eslogan: "Tómate un respiro, tómate un Kit Kat".