Nike quiere diferenciar sus zapatillas a través de un atributo muy valorado en el mundo de los deportes y del ejercicio físico: la flexibilidad. El calzado de esta marca puede presumir de este beneficio y para comunicarlo han decidido crear una acción que no deja indiferente a nadie.
Una vez más la multinacional se decanta por la innovación, ya sorprendió anteriormente con un estupendo escaparate interactivo y ahora lo hace por todo lo grande, no con una simple acción de marketing sino con una novedosa estructura.
Desde Nike se han encargado de construir un espacio que se mueve al ritmo del consumidor o de quien decida participar subiéndose a su plataforma. Se trata de una especie de tienda que es capaz de seguir los movimientos de las personas a través de dispositivos tecnológicos, consiguiendo dejar impactados a todos los espectadores.
Esta idea surge con el objetivo de dar a conoces su nueva zapatilla la Nike Free, pero sobre todo ofrecer a los consumidores no solo un producto, sino más bien una experiencia: "crear productos, servicios y experiencias que utilizan la tecnología para hacer que la gente se mueva”
La estructura interactiva tiene 8 metros de altura, pesa 13,2 toneladas y tiene 180 motores distribuidos con sensores Kinect capaces de detectar y responder al movimiento. Quizás sea un poco difícil de imaginar, así pues os dejo un enlace con un vídeo que creo que deja ver perfectamente la peculiar e ingeniosa idea de esta marca deportiva.
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