Katy Perry y su estrategia para vender discos a través de semillas desata quejas en Australia.

Si habéis viajado a Estados Unidos os daréis cuenta de que en una hoja que tienes que rellenar para el Control de Aduanas, te preguntan si viajas con algún animal o planta, ya que exportar/importar distintas especies puede alterar el ecosistema del país.


Esto es una preocupación que aunque parezca una tontería puede llegar a ser muy seria. En ella se ha fundamentado el Departamento de Agricultura australiano para declarar el nuevo disco de Katy Perry como un riesgo biológico para el país.

El problema con el álbum de la artista es que está siendo comercializado a través de un embalaje hecho con papel de semillas. La cantante además, ha alentado a sus seguidores a través de Twitter a que utilicen las semillas y las planten.


Esta original idea o estrategia que tanto ha gustado a sus fans, no ha entusiasmado a las regulaciones de Australia ya que los consumidores pueden pedir sus copias online, lo cual significa que el disco llegaría desde otro país. Debido a esta situación, todos los discos que lleguen a Australia y sean identificados, serán confiscados.

En su defensa, los productores del álbum aseguraron que las semillas son de margaritas  y son consideradas inofensivas. Aún así, los funcionarios australianos no se la quieren jugar en la mezcla de ecosistemas y siguen determinados a prohibir la obtención de este producto en su país.